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Mira hacia atrás y una vez más tropieza y cae;
alguien se rie.
Cada mirada, cada palabra es un desafío;
hay que seguir.
Se pone en pie y cree tener algún sentido;
vuelve a correr.
Piensa en llegar, tan sólo en llegar
tiene que haber algún final.
Ya estás corriendo otra vez, tu virtud aparece y renaces de
nuevo; así...
Han frenado tu carrera.
Has usado mil maneras
para hacerte desistir pero has resistido.
Te han quemado en mil hogares
y no mueres porque mueras;
tú eres la contradicción, eres toda una razón.
¡Dejame! déjame apostar por tí,
déjame, voy a aplaudir tu actitud, ¡déjame!
¡Sigue así! déjame apostar por tí,
déjame pensar que al fin llegarás; llegarás.
Llega a dudar, suele dudar se sabe solo;
¡hay que aguantar!
Piensa en llegar, tan sólo en llegar
tiene que haber algún final.
¡Déjame creer en tí!
¡Déjame apostar por tí!
déjame pensar que al fin llegarás; llegarás.
Y si al final no es más que un fin
yo creo en tí; tú eres el fin;
CORREDOR; ¡INCANSABLE LUCHADOR!