Dedicar Letra El Vals De Los Jubilados de Ismael Serrano

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 te dedica El Vals De Los Jubilados de Ismael Serrano y te envía el siguiente mensaje:

Mensaje
Se levanta muy temprano
con todo el día por delante.
Y da vueltas por la casa,
estorbando en todas partes.
Se anuda al fin la corbata,
en tiempos tan elegante.
Lo mismito que un pincel
el viejo se echa a la calle.

Con el pan debajo el brazo
visita todos los bares.
Tomás, ponnos unos tintos
que invito a las amistades.
A voces arregla el mundo
y a voces, aunque se pase,
pontifica de los toros,
de la liga y del cante.

"Si las cosas, ya le digo,
soplaran con otros aires,
y aquella maldita guerra
como acabó no acabase,
ni aquí estaría yo ahora,
ni usted. Y lo más probable
es que la tortilla misma
la vuelta tendría que darse".

Y suspira con nostalgia
de aquel que todo lo sabe.
Y una mirada a esa niña,
que la edad no mata el hambre.
Hoy es día veintiocho
y la pensión viene tarde.
"A los viejos, ya le digo,
lo bailao no nos quita nadie".

Con un vinito en el cuerpo
el viejo a su casa se abre.
Ella lo espera en la puerta.
"Menudo cuerpo me traes".
Comen los dos en silencio.
De vez en cuando una frase
rompe las cuatro paredes.
"¿Decías algo?¿Me hablaste?".

Son tantos años de oírse
que no saben escucharse.
"¿Sabes algo de los chicos?"
"El mayor llamó ayer tarde".
Pasan el tiempo en silencio.
Después de comer no salen.
Luego cenan y ven tele
un ratito y a acostarse.

Si las cosas, es verdad,
soplaran con otros aires.
Si la sombra del olvido
con el tiempo no arrastrase
recuerdos que en este otoño
dejan huérfano el paisaje,
otro gallo cantaría,
quizá no sería tan tarde.

Y suspira con nostalgia
de aquel que todo lo sabe.
Y una mirada a esa niña,
que la edad no mata el hambre.
Hoy es día veintiocho
y la pensión viene tarde
A los viejos, ya le digo,
lo bailao no nos quita nadie.
Tomado de AlbumCancionYLetra.com
A veces mi padre, mientras recorremos las tabernas de La Latina y tomamos el vermú matinal, me cuenta la historia de los jubilados que como almas en pena recorren los bares buscando la charla y el calor de los bares. Aunque algunos dicen que se bebe para olvidar, lo cierto es que en aquellos lugares se bebe para recordar. Recordar y aprender que a veces el amor consiste en saber aburrirse juntos, que hay gente que se pasa la mitad de la vida esperando, esperando una llamada de teléfono o sólo el recuerdo.
Como es tradición en mis discos allá va esta canción con letra de mi padre, homenaje a los jubilados, por lo que fueron, por lo que son y por lo que seremos.

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