Letra de canción descargada de: https://www.albumcancionyletra.com ------------------------------------------ Rocío Jurado - La Noche ------------------------------------------ En vilo entre la arena y el lucero, la risa por el llanto desgarrada, así está la mujer que ama a un torero herida y sin herir por la cornada. Las tardes, cuando el sol y los claveles palpitan en la cal como un latido,Giro el anillo sobre mi dedo y estuve a punto de amortajarme... la noche entera se despojaba sobre la calle, sobre la calle. - ¡Me voy ahora! - ¡No! ¡Por los clavos de Cristo! ¡Quédate! ¡Quédate! ¡Quédate! ¡Quédate! ¡Quédate! Entre mis pulsos corría un perro sucio de sangre - ¡No! ¿No me dejes...! - Mi vos estaba llena de miedos y de cristales...Giro el anillo sobre mi dedo y estuve a punto de amortajarme... la noche entera se despojaba sobre la calle, sobre la calle. - ¡Me voy ahora! - ¡No! ¡Por los clavos de Cristo! ¡Quédate! ¡Quédate! ¡Quédate! ¡Quédate! ¡Quédate! Entre mis pulsos corría un perro sucio de sangre - ¡No! ¿No me dejes...! - Mi vos estaba llena de miedos y de cristales... - ¡Porque yo fuera de ti en el mundo no tengo a nadie, no tengo a nadie! No tengo a nadie No tengo a nadie hubo un silencio... sobre mi boca cayó la tuya... después, el aire movió el visillo, como bandera blanca de paces... fuera, la noche se desangraba sobre la calle, sobre la calle... - ¡Porque yo fuera de ti en el mundo no tengo a nadie, no tengo a nadie! No tengo a nadie No tengo a nadie hubo un silencio... sobre mi boca cayó la tuya... después, el aire movió el visillo, como bandera blanca de paces... fuera, la noche se desangraba sobre la calle, sobre la calle... se han clavado el puñal de cien carteles el guapo que hoy torea: ¡es tu marío! No piensan en la pena que te abraza la sién, el paladar y la cintura ahogandose minuto por minuto ahogandose minuto por minuto. Y tú ves el anillo de la plaza así te escondas en la cueva oscuraGiro el anillo sobre mi dedo y estuve a punto de amortajarme... la noche entera se despojaba sobre la calle, sobre la calle. - ¡Me voy ahora! - ¡No! ¡Por los clavos de Cristo! ¡Quédate! ¡Quédate! ¡Quédate! ¡Quédate! ¡Quédate! Entre mis pulsos corría un perro sucio de sangre - ¡No! ¿No me dejes...! - Mi vos estaba llena de miedos y de cristales... - ¡Porque yo fuera de ti en el mundo no tengo a nadie, no tengo a nadie! No tengo a nadie No tengo a nadie hubo un silencio... sobre mi boca cayó la tuya... después, el aire movió el visillo, como bandera blanca de paces... fuera, la noche se desangraba sobre la calle, sobre la calle... y Abril que siempre amor.. te sabe a luto y Abril que siempre amor.. te sabe a luto. Así está la mujer que ama a un torero, Así está la mujer que ama a un torero.