Vamos a pasear por la pradera en un vagón,
que nos mantenga secos y despiertos,
que nos separe de los vivos y los muertos,
un vagón.
Y vamos a tirar por la ventana los recuerdos,
vamos a viajar entrelazados en el tiempo,
vamos a seguir los caminitos pedregosos que nos lleven hacia el cosmos.
Nada me alivia tanto, como irte dejando atrás.
Y nada me alivia tanto, como irte dejando atrás.
Y vamos a saber como es la cara del que manda,
vamos a mirar desde el espacio la galaxia,
vamos a seguir los caminitos tan angostos que nos lleven hacia el cosmos.
Nada me alivia tanto, como irte dejando atrás.
Y nada me alivia tanto, como irte dejando atrás.
Nada me alivia tanto, como irte dejando atrás.
Y nada me alivia tanto, como irte dejando atrás.
«Atención:
A su derecha se encuentra la vía lactea.
En ella se encuentran más de un millón de estrellas.
Favor de abstenerse a sacar las manos del carrito,
y de tomar fotografías con flash.»
Nada me alivia tanto como irte dejando atrás.
Nada me alivia tanto como irte dejando atrás.
Dejando... atrás.
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