Hoy vienes a mí, buscando
perdón, desnuda y muy
pura, oigo tu voz.
Como una princesa cargada
de fe. Cual niña traviesa,
que mancha su piel.
Eh, te he visto resplandecer,
como las nubes en rojo atardecer.
Y sé quien fue, la que me hizo
tragar para luego escupir.
Y sé que el sol, hoy brilla por
mí y me hace reir.
Sé que no te daré, otra oportunidad.
Te bebes el mar, buscando la sal,
te comes el pan que quisiste tirar.
Y cuestiónate el porqué una flor,
convierte en miel su propio dolor.
Eh, te he visto resplandecer,
como las nubes en rojo atardecer.
Y sé quien fue, la que me hizo
tragar para luego escupir.
Y sé que el sol, hoy brilla por
mí y me hace reir.
Sé que no te daré, otra oportunidad.
Y sé quien fue, la que me hizo
tragar para luego escupir.
Y sé que el sol, hoy brilla por
mí y me hace reir.
Sé que no te daré, otra oportunidad...
Otra oportunidad...
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