Y otra más, otra noche solo sin querer dormir. Aquel lugar parecía distinto; había magia allí. Observé aquellas paredes con curiosidad. Me detuve frente a aquella foto típica escolar.
Me acerqué y vi en tu mirada algo especial. Y sentí cómo me llamabas; la tercera por la izquierda en pie.
Te invité a salir del cuadro; te abrazaste a mí.
Destrocé el enigma inerte de tu quietud.
Eras papel ahora eres vida. ¡Yo te la dí! Y sentí como tú me amabas; la tercera por la izquierda en pie.
Vente a mi mundo o déjame en el tuyo PRISIONERA ENMARCADA.
Eres real, ¡como nada ni nadie! PRISIONERA ENMARCADA.
Ya ves llegué setenta años tarde; ¡pensaste en mí!
Y sentí que tu me amabas; la tercera por la izquierda en pie.
|