Camina silbando alegre
Dobla la esquina y cruza la calle
Llega a un muro, mete la mano en su bolsillo y saca una llave de oro
Atada a una soga de muchos colores
Desata la llave la pone en el cerrojo
Le da media vuelta y la puerta se abre de par en par
Mete una pierna y saluda a le gente
Mete la otra y, de repente, aparece del otro lado
Cuando llega la noche se abre el candado sale él contento y mejorado, cierra la puerta le ata a la soga la guarda en su bolsillo y silbando se va caminando.
La gente que zumbando va pasando entre las sombras bajo la luz de los faroles lo suele mirar
Y así, siempre igual, todos los días
Pero una noche alguien la curiosidad no pudo soportar
Y con un cuchillo lo asesinó
Cayó su cuerpo frío como el carbón
Como un pedazo de algodón
Se robo la llave y la puerta abrió
Le saco la cuerda
Medio vuelta le dio
y en la entrada se metió
Incrustada una sonrisa que se desvanece?era solo una simple habitación.
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