Siete menos veinte y desperté,
al abrir los ojos encontré
un montón de cosas por hacer.
Por dónde empezar me pregunté.
La casa virada al revés.
Los platos del piso, yo no sé.
La niña a la escuela llevaré,
un poquito tarde, ya lo sé.
Es uno de esos días que no das a más,
que en vez de veinticuatro horas quieres cien
para arreglarlo todo y dejarte querer también.
Si suficiente nos fuera el tiempo
yo te amaría constantemente.
Desorganizada me sentí,
corriendo por toda la ciudad.
No me alcanza el tiempo, yo pensé
ni para una taza de café.
Quisiera besarlo cada vez
que viene a mi mente. Yo no sé
cómo podré amarlo sin tener
mi vida ordenada para él.
Si suficiente nos fuera el tiempo
yo te amaría constantemente.
Es uno de esos días que no das a más,
que en vez de veinticuatro horas quieres cien
para arreglarlo todo y dejarte querer también.
Si suficiente nos fuera el tiempo
yo te amaría constantemente.
Si suficiente nos fuera el tiempo
yo te amaría constantemente.
|