Con la perturbación de la aurora la Diosa despertó y el ave dormitando en el bosque trinó junto a las flores
El sol esfera flotante al cielo brillará La luz logró pintar toda la foresta y el canto se oye ya
Diosa salvaje somos tu piel somos tu cuerpo cuerpo sin sed
Y con la melodía del alba la Diosa echó a danzar y aquel violín lejano y canoro su tallo hace sonar
Y los coatíes del monte oirán también la voz creando girasoles ocultos el sol se agitará
Diosa salvaje somos tu piel somos tu cuerpo cuerpo sin sed
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