Me gusta cantarle al viento porque vuelan mis cantares y digo lo que yo siento por toditos los lugares.
Aquí vine porque vine a la feria de las flores no hay cerro que se me empine ni cuaco que se me atore.
En mi caballo retinto he venido de muy lejos y traigo pistola al cinto y con ella doy consejos.
Atravesé las montañas por venir a ver las flores aquí hay una rosa huraña que es la flor de mis amores.
Y aunque otro quiera cortarla yo la divisé primero y juro que he de arrancarla aunque tenga jardinero.
Yo la he de ver trasplantada en el huerto de mi casa y si sale el jardinero pues a ver, a ver qué pasa.
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