Salió sin rumbo cuando en la sombra aún manda el gris La hora de la melancolía Sentir las cenizas de tus entrañas, algo por dentro devora
Es un deseo que todo reviente El recuerdo de unas caricias metido en la cabeza Un cerrar los ojos y dejarse flotar, una confesión sincera Sin buscar la excusa en el brillo de los ojos Recibiendo el mayor castigo
Llegar a tocar el fondo con el pie En mis botas leerás tu nombre, tu nombre
Parece que nada sirve para aprender, sé bueno y echa a volar Saca tu vida de este cabaret, demasiados cuentos Chasquean los dedos en tus narices ríen sin piedad de ti Que pasen la bandeja, la colecta acaba de empezar
Llegar a tocar el fondo con el pie En mis botas leerás tu nombre, tu nombre
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