Martín Estrada Contreras un tahúr profesional
Tuvo un amor desde niño que nunca pudo olvidar
Puso sus ojos muy alto el hijo del caporal
Raúl Vidal hombre rico le robó a Martín su amor
Con un balazo en la pierna del pueblo Martín partió
Pasado el tiempo regresa y casada ya la encontró
Volvió Martín ya muy rico con Raúl vino a jugar
Pero Raúl perdió todo ya no tenía que apostar
Tú tienes algo en la vida que yo no pude alcanzar
Va todo lo que yo tengo si su amor quieres jugar
Raúl se quedó pensando y al fin decidió aceptar
Le destaparon cuatro ases se sintió Raúl morir
Del juego así son las leyes hay que aprender a sufrir
Raúl tenía cuatro reyes no había ni qué discutir
(HABLADO) Mira Raúl pa mí las deudas de juego son siempre deudas de honor Te gané te gané lo que más quiero ya había otra deuda anterior creo que ya estamos a mano y me pagas ahora mismo si te queda algo de honor
Raúl volvió con su esposa y al abrir Martín la puerta
Vidal descargo su arma y cayó su esposa muerta
Martín la tomó en sus brazos y mirando a su rival sacó también su pistola y mató a don Raúl Vidal
|