Por tu sangre corre adrenalina tu pecho está a punto de estallar esperás con ansias la electricidad.
Atrapada sin salida esa exaltación ya disfrutás tu instrumento de felicidad.
Tu instinto te lleva a ese momento el exceso con nada comparás y en el lecho acabas con esa fuerza.
Días de blanca alegría Van pasando a gran velocidad Le pones el pecho a tu libertad.
Pulposa satisfacción nena ese es el juego, el que te hace vibrar el que te hace llorar y el que te hace sangrar.
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