Traducción de la letra A través de mis ojos de Jorge Luis Diaz Granados Lugo

Idioma Origen:

En un pasado ya muy lejano, en un tiempo ya transcurrido,
donde quizás mis memorias, recuerdos y entendimiento eran
escasos, nulos. Dónde el alma yace pura y cristalina ante las
adversidades que lo rodean, dónde eres tan vulnerable a las
acciones de personas enfermas que conforman el mundo,
donde eres tan vulnerable de los deseos de bestias con
forma humana y rostros de ángeles. Ocurrió un hecho
oscuro, cruel, depravado, que desde entonces ha
marcado mi vida haciéndola un infierno.
 
Mi niñez, mis primeros rayos de luz, mi inocencia,
mi infancia, mi vida, quizás simple, quizás humilde,
pura, alegre. Fue interrumpida, corrompida,
sí aunque tal vez no recuerde mucho de
ello, pero… algo así no se olvida, nunca.
 
Fui, abusado sexualmente, violado por una mujer mayor,
adulta. Que en su frenesí carnal, morboso, y deseos de
placer descontrolado, iracundo, vendaba mis ojos, me
sujetaba las manos, y... me hacía cosas, allí abajo (en
mis genitales, pene).
 
Otras veces me amenazaba con maltratarme utilizando una correa
o cinturón para golpearme llena quizás de lujuria, o depravación
totalmente desnuda con sus pechos y humanidad al aire, otras
veces me amenazaba con hacerme daño físico si no hacía lo
que ella quisiera o si no me quedaba quieto, otras veces…
solo lo hacía, mientras con sus dos manos solo me
sujetaba el cuello con gran fuerza (presión), perdida
ella en su éxtasis y goce, encima de mí.
 
Todos los días tengo pesadillas de ello, todos los días
observo a la mujer amenazándome con un objeto en
su mano; para hacer lo que ella me dijera o cumplir
sus exigencias, todos los días temo que vuelva a
suceder, a pesar que ha transcurrido tanto tiempo.
Recuerdo perfectamente donde ocurrió, la casa,
el lugar, el barrio, la forma… Tal vez, este hecho
ha marcado mi vida desde entonces, tal vez me
ha hecho ser como soy ahora, no sé si por ello
he despertado un miedo a las mujeres, no sé
si tal vez ya lo he superado, no lo sé. Pero
algo dentro de mí no es igual, y lo siento,
lo siento.
 
Esto que os cuento ahora, es una parte negra,
oscura de mi vida. Tan oscura que me prometí
nunca decirlo, me prometí nunca decirles nada
a mis familiares, a nadie. Pero que ahora
quiero que conozcan; y vean el lado
oscuro de mi triste vida.
 
Vean, a través
de mis ojos.
Idioma Destino:

En un pasado ya muy lejano, en un tiempo ya transcurrido,
donde quizás mis memorias, recuerdos y entendimiento eran
escasos, nulos. Dónde el alma yace pura y cristalina ante las
adversidades que lo rodean, dónde eres tan vulnerable a las
acciones de personas enfermas que conforman el mundo,
donde eres tan vulnerable de los deseos de bestias con
forma humana y rostros de ángeles. Ocurrió un hecho
oscuro, cruel, depravado, que desde entonces ha
marcado mi vida haciéndola un infierno.
 
Mi niñez, mis primeros rayos de luz, mi inocencia,
mi infancia, mi vida, quizás simple, quizás humilde,
pura, alegre. Fue interrumpida, corrompida,
sí aunque tal vez no recuerde mucho de
ello, pero… algo así no se olvida, nunca.
 
Fui, abusado sexualmente, violado por una mujer mayor,
adulta. Que en su frenesí carnal, morboso, y deseos de
placer descontrolado, iracundo, vendaba mis ojos, me
sujetaba las manos, y... me hacía cosas, allí abajo (en
mis genitales, pene).
 
Otras veces me amenazaba con maltratarme utilizando una correa
o cinturón para golpearme llena quizás de lujuria, o depravación
totalmente desnuda con sus pechos y humanidad al aire, otras
veces me amenazaba con hacerme daño físico si no hacía lo
que ella quisiera o si no me quedaba quieto, otras veces…
solo lo hacía, mientras con sus dos manos solo me
sujetaba el cuello con gran fuerza (presión), perdida
ella en su éxtasis y goce, encima de mí.
 
Todos los días tengo pesadillas de ello, todos los días
observo a la mujer amenazándome con un objeto en
su mano; para hacer lo que ella me dijera o cumplir
sus exigencias, todos los días temo que vuelva a
suceder, a pesar que ha transcurrido tanto tiempo.
Recuerdo perfectamente donde ocurrió, la casa,
el lugar, el barrio, la forma… Tal vez, este hecho
ha marcado mi vida desde entonces, tal vez me
ha hecho ser como soy ahora, no sé si por ello
he despertado un miedo a las mujeres, no sé
si tal vez ya lo he superado, no lo sé. Pero
algo dentro de mí no es igual, y lo siento,
lo siento.
 
Esto que os cuento ahora, es una parte negra,
oscura de mi vida. Tan oscura que me prometí
nunca decirlo, me prometí nunca decirles nada
a mis familiares, a nadie. Pero que ahora
quiero que conozcan; y vean el lado
oscuro de mi triste vida.
 
Vean, a través
de mis ojos.